Comprar coches de segunda mano: tener todo al día
Comprar coches segunda mano es una buena fórmula de suplir la necesidad de disponer de un vehículo por un precio más reducido y con unas buenas prestaciones. Pero para no llevarse ninguna sorpresa en el proceso de compraventa resulta imprescindible tener en cuenta algunos aspectos importantes a la hora de realizar este tipo de trámites.
Comprar coches segunda mano sin riesgos
Lo primero que debe tener en cuenta es que va adquirir un vehículo ya usado por lo que las garantías aplicables a su compra serán más reducidas que si adquiere un vehículo de fábrica.
Con todo, esto no ha de suponer ningún impedimento. También los coches de segunda mano están obligados a ofrecer una serie de garantías básicas, pero es mejor que se asegure de que las cumple según lo establecido antes de ejecutar la compra.
Aparte de revisar físicamente el vehículo tanto desde el interior (cierres, ventanillas, tapicería y asientos, volante, indicadores, luces...) como desde el exterior (carrocería, defensas, luces, pilotos, suspensión) y también con el coche en funcionamiento (prestando especial atención al motor, el radiador y la batería para asegurar que no existen pérdidas), es importante realizar algunas comprobaciones previas de carácter legal y burocrático.
Tener todo al día para la compraventa de un coche
Tanto si es usted el comprador como el propietario del vehículo de segunda mano que se encuentra en venta, antes de cerrar la compra es necesario justificar la situación legal del vehículo aportando la documentación correspondiente:
Asegurarse de que el vehículo está completamente pagado.
Comprobar que el coche se encuentra libre de cargas (como por ejemplo una multa de tráfico).
Disponer de la documentación obligatoria en cualquier vehículo (tarjeta de inspección, permisos habituales y permisos especiales en caso de que disponga de algún tipo de accesorio).
Revisar que ha pasado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV).
Estar al día con el impuesto de circulación.
Disponer de la ficha técnica del vehículo.
En definitiva, cuanta más información disponga a la hora de comprar coches segunda mano más seguro será el procedimiento. En este sentido lo más recomendable tanto para el comprador como para el vendedor del vehículo es que una gestoría se encargue de esta parte del proceso.
Comprar coches segunda mano sin riesgos
Lo primero que debe tener en cuenta es que va adquirir un vehículo ya usado por lo que las garantías aplicables a su compra serán más reducidas que si adquiere un vehículo de fábrica.
Con todo, esto no ha de suponer ningún impedimento. También los coches de segunda mano están obligados a ofrecer una serie de garantías básicas, pero es mejor que se asegure de que las cumple según lo establecido antes de ejecutar la compra.
Aparte de revisar físicamente el vehículo tanto desde el interior (cierres, ventanillas, tapicería y asientos, volante, indicadores, luces...) como desde el exterior (carrocería, defensas, luces, pilotos, suspensión) y también con el coche en funcionamiento (prestando especial atención al motor, el radiador y la batería para asegurar que no existen pérdidas), es importante realizar algunas comprobaciones previas de carácter legal y burocrático.
Tener todo al día para la compraventa de un coche
Tanto si es usted el comprador como el propietario del vehículo de segunda mano que se encuentra en venta, antes de cerrar la compra es necesario justificar la situación legal del vehículo aportando la documentación correspondiente:
Asegurarse de que el vehículo está completamente pagado.
Comprobar que el coche se encuentra libre de cargas (como por ejemplo una multa de tráfico).
Disponer de la documentación obligatoria en cualquier vehículo (tarjeta de inspección, permisos habituales y permisos especiales en caso de que disponga de algún tipo de accesorio).
Revisar que ha pasado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV).
Estar al día con el impuesto de circulación.
Disponer de la ficha técnica del vehículo.
En definitiva, cuanta más información disponga a la hora de comprar coches segunda mano más seguro será el procedimiento. En este sentido lo más recomendable tanto para el comprador como para el vendedor del vehículo es que una gestoría se encargue de esta parte del proceso.
